Una sartén es un utensilio de cocina, usado para freír, generalmente en aceite o mantequilla. Consiste en un recipiente metálico de bordes bajos y abiertos y una manija generalmente plástica (baquelita) para sujetarlo. Actualmente viene recubierto de teflón antiadherente, que facilita mucho la cocción o fritura de los alimentos.
Los materiales más comunes de fabricación de sartenes son:
- Aluminio. Es un material ligero que consigue una óptima distribución del calor. Sin embargo, no está indicado para cocinas de inducción.
- Acero no aleado. Es apropiado para todo tipo de cocinas.
- Acero inoxidable. Puede presentar problemas en las mencionadas cocinas de inducción.
Algunos consejos prácticos
- Se recomienda evitar el uso de cucharas metálicas para no rallar el interior de las sartenes. Durante la cocción, se pueden usar en su lugar utensilios fabricados en madera o plástico.
- Es recomendable lavar las sartenes con esponja evitando introducirlas en el friegaplatos o el uso de estropajos metálicos.
- Para evitar pérdidas de calor es imprescindible escoger la sartén más adaptada al tamaño de la cocina. Con ello, se evitarán también pegotes y olores por derramamientos sobre el fuego.
- Es imprescindible orientar el mango de la sartén hacia el interior de la cocina para evitar posibles accidentes domésticos.
- Es importante que el mango sea de un material aislante para evitar el calor.
- Puede ser usado como arma si el marido llega tarde y con olor a alcohol.
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